La gobernadora de Nueva York, Kathy Hochul, ha implementado una prohibición estatal que impide el uso de la startup de inteligencia artificial china DeepSeek en todas las redes y dispositivos gubernamentales. Esta decisión se tomó debido a crecientes preocupaciones sobre la vigilancia gubernamental y la integridad de los datos sensibles.
La prohibición forma parte de una conversación más amplia sobre la seguridad nacional y la integración de tecnología extranjera en las operaciones gubernamentales. La medida podría establecer un precedente para otros estados en la gestión de sus relaciones con empresas tecnológicas extranjeras, especialmente aquellas que involucran capacidades de vigilancia.
La decisión de Hochul también menciona la censura patrocinada por el estado, ya que la tecnología de DeepSeek puede promover visiones del mundo favorables a China. Esta prohibición podría tener un impacto significativo no solo en las medidas de ciberseguridad, sino también en las relaciones internacionales y la innovación dentro del sector tecnológico[1][3][4].