Israel ha establecido una nueva agencia dentro del Ministerio de Defensa con el objetivo de coordinar la expulsión de palestinos de la Franja de Gaza, bajo el disfraz de reubicación voluntaria . Esta medida ha sido ampliamente condenada como un intento de desplazamiento forzado y limpieza étnica.
La agencia, que reportará directamente al Ministro de Defensa Israel Katz, se encargará de organizar el traslado de residentes de Gaza a terceros países, manejar las evaluaciones de seguridad y la logística del transporte para aquellos que sean forzados a dejar la región.
Este plan se alinea con la visión del expresidente de los Estados Unidos, Donald Trump, quien había propuesto la reubicación masiva de palestinos en Gaza como parte de una estrategia más amplia para el Medio Oriente. La propuesta de Trump, criticada por ser un plan de limpieza étnica, también incluyó la posibilidad de una toma de control estadounidense de Gaza, una idea rechazada firmemente por las naciones árabes.
Oficiales israelíes, incluyendo a los ministros de extrema derecha Bezalel Smotrich e Itamar Ben-Gvir, han llamado a una toma militar total de Gaza y la establecimiento de asentamientos israelíes en el territorio. Ben-Gvir ha urgido a repoblar Gaza con judíos, mientras que Smotrich aboga por una presencia de colonos permanente.
La decisión se produce en medio de una renovada ofensiva militar israelí en Gaza, donde más de 61,700 palestinos han sido asesinados desde el inicio de la guerra, la mayoría mujeres y niños. Las recientes incursiones aéreas israelíes han intensificado desde que Israel rompió el alto el fuego de enero, resultando en cientos de muertos.
El ejército israelí ha expandido sus operaciones terrestres en Gaza, tomando más territorio y continuando con bombardeos indiscriminados. En la Franja de Gaza, más de dos millones de palestinos viven en condiciones de grave crisis humanitaria, enfrentando severas escasez de alimentos, agua y suministros médicos.
Israel también ha intensificado las acciones punitivas en los territorios palestinos. En Tulkarem, las fuerzas israelíes realizaron evacuaciones masivas, destruyendo infraestructura y desplazando forzadamente a familias palestinas. El ejército ha aumentado su presencia en Jenin, enviando refuerzos y bulldozers militares para destruir carreteras y expandir el control.
La nueva agencia también se encargará de crear puntos de cruce designados en las fronteras de Gaza y coordinar la infraestructura para permitir el viaje por tierra, mar y aire. Katz está esperado para nombrar a un jefe para la dirección pronto.
Oficiales estadounidenses e israelíes han abordado a Sudán, Somalia y Somaliland sobre la posibilidad de absorber a palestinos de Gaza a cambio de beneficios financieros, diplomáticos y de seguridad. Sin embargo, no está claro si estos regímenes aceptarían tal propuesta[2][3][4].