El ministro del Interior de Ecuador, John Reimberg, anunció que se reunirá con las principales operadoras de telefonía móvil del país el próximo miércoles para llegar a un acuerdo que permita cortar la señal de celulares en las cárceles.
Reimberg destacó que la seguridad de los ecuatorianos es la prioridad y que es necesario tomar medidas para frenar el uso de teléfonos móviles dentro de las cárceles. Los reclusos han utilizado estos dispositivos para ordenar asesinatos, realizar llamadas extorsivas y transmitir en vivo durante masacres carcelarias.
Durante un reciente operativo en la Penitenciaría del Litoral, la cárcel más grande y peligrosa del país, Reimberg constató que era posible conectarse a la red móvil. Esto ha permitido a los presos mantenerse comunicados con el exterior y cometer various delitos.
Las operadoras de telefonía, incluyendo Claro, Movistar y la estatal Corporación Nacional de Telecomunicaciones (CNT), han sido solicitadas para cortar la señal en las zonas aledañas a las prisiones. Sin embargo, la Asociación de Empresas de Telecomunicaciones (Asetel) argumentó que apagar completamente la señal afectaría a las comunidades cercanas y sus actividades productivas.
Asetel ofreció herramientas complementarias para aplicar restricciones técnicas dentro de los límites viables. Reimberg advirtió que si las empresas no cooperan, se tomarán acciones legales contra ellas, ya que estas zonas son consideradas de seguridad y están bajo el control de las Fuerzas Armadas y la Policía.
Además, se mencionó que los inhibidores de señal, que ya se han utilizado en el pasado, se demorarían al menos ocho semanas en llegar al país. Reimberg expresó su confianza en que se llegará a un acuerdo con las operadoras para resolver este problema.